A cuatro años del secuestro y tortura de siete periodistas en el predio Las Londras, provincia Guarayos (Santa Cruz), las víctimas siguen sin justicia y los agresores continúan en libertad. El 28 de octubre de 2021, un grupo armado encapuchado emboscó a una caravana compuesta por comunicadores, policías y trabajadores agrícolas, los retuvo por más de ocho horas y los agredió brutalmente para impedir la difusión de los hechos.

El Informe Especial Las Londras, elaborado por organizaciones de periodistas y derechos humanos, denuncia la parálisis del proceso judicial: tres de los imputados están prófugos y dos enfrentan el juicio en libertad. Además, la causa fue suspendida tras un intento de trasladarla a la jurisdicción indígena originaria campesina, una maniobra que las víctimas consideran un mecanismo de revictimización.

El informe señala que las demoras, los cambios de fiscales y la falta de investigación son muestra de una falla estructural del sistema judicial boliviano para garantizar justicia y protección a la prensa. Esta impunidad no solo afecta a las víctimas directas, sino que envía un mensaje de censura y miedo al conjunto del periodismo nacional, debilitando la democracia y el derecho ciudadano a una información libre y plural.

Las organizaciones firmantes exhortan al Estado a reanudar de inmediato el juicio, crear un Mecanismo Nacional de Protección a Periodistas y garantizar medidas de reparación y no repetición. El caso Las Londras sigue siendo una herida abierta en la libertad de prensa boliviana.