“Un humedal que Inspira un Bofedal que respira”
La muestra de murales sobre humedales en los salares bolivianos es una poderosa herramienta de educación, sensibilización y resistencia. A través de estas pinturas de gran formato se visibilizan ecosistemas únicos y frágiles, resaltando su biodiversidad, sus funciones ecológicas esenciales y el profundo valor espiritual que tienen para las comunidades originarias. Estos murales no solo generan una conexión con la fauna y el paisaje, sino que también transmiten saberes ancestrales que fortalecen la identidad local. Ubicados a lo largo del recorrido por Uyuni, San Cristóbal y Mallku Villamar, se convierten en espacios de denuncia frente a las amenazas de la minería del litio. La participación de la comunidad para su creación refuerza la defensa del territorio y de las especies representadas, transformando el espacio público en un lienzo de memoria viva que inspira a proteger lo que nos sostiene: el agua.
BOFEDALES ALTOANDINOS
Ubicados entre los 3.500 y 5.000 metros sobre el nivel del mar, los bofedales son verdaderos jardines de agua en un paisaje dominado por el frío y la aridez. Se forman a partir de suelos húmedos, vegetación resistente y corrientes de agua subterránea, alimentados por lluvias, deshielos de glaciares y, en lugares como la región de Lipez, por fuentes fósiles acumuladas hace millones de años.
Los humedales son cruciales para la vida en las alturas. Sostienen una notable diversidad de especies: desde flamencos y vizcachas hasta camélidos como la vicuña y la llama, e incluso depredadores como el puma y el zorro andino, que dependen de este ecosistema.
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