Los ingresos por hidrocarburos en Bolivia han crecido considerablemente, especialmente desde la aprobación de la Ley de Hidrocarburos 3058 y la implementación del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH).
Datos de las gestiones 2005, 2006 y 2007 reflejan que el IDH es la principal fuente de ingresos para el Tesoro General de la Nación (TGN). Además, el Impuesto Especial a los Hidrocarburos y Derivados (IEHD) también ha mostrado un aumento significativo, alcanzando incluso niveles superiores al IDH en 2005. Aunque ambos impuestos han crecido, las diferencias en sus contribuciones son mínimas.