Marcha rechaza otra invitación del Gobierno (La Prensa 31/08/2011)
Claudia Peña, Sacha Llorenti y Carlos Romero esperarán esta mañana a los indígenas.
Un nuevo escenario se abre en el conflicto que mantienen los indígenas del TIPNIS y el Gobierno. Los indígenas rechazaron anoche una nueva invitación a dialogar hecha por el ministro de Comunicación, Iván Canelas.
Los indígenas iniciaron una marcha el 15 de agosto en Trinidad con el objetivo de llegar a La Paz para rechazar la construcción de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos que atraviesa el área protegida del TIPNIS.
Canelas anunció la convocatoria a representantes de la marcha para dialogar con los ministros de la Presidencia, Carlos Romero; de Gobierno, Sacha Llorenti, y de Autonomías, Claudia Peña, en San Ignacio de Moxos desde las 10.00 de hoy. “Nosotros estamos mandando los ministros con poder de decisión para que no se diga que tienen que consultar”.
La autoridad indicó que la respuesta será conocida a través de la presencia o la ausencia de los dirigentes en la Alcaldía de San Ignacio de Moxos.
Sin embargo, Valle Press informó que los marchistas no recibieron tal invitación y, por la noche, el Comité de Marcha analizó el resultado de las gestiones hechas por el Defensor del Pueblo.
Rolando Villena anunció a los indígenas que para esta tarde estaba prevista la presencia de los ministros Teresa Morales, Nemesia Achacollo, Wálter Delgadillo y Claudia Peña, tres viceministros por designarse, los directores ejecutivos de la Administradora Boliviana de Carreteras y del Instituto Nacional de Reforma Agraria.
Por la mañana, esa fue la posición expresada por el titular de la Presidencia, Carlos Romero, pero el Comité de Marcha rechazó la propuesta y resolvió reanudar la caminata a las 04.00 de hoy para recorrer 32 kilómetros hasta alcanzar Estancia La Punta y mañana llegar antes de mediodía a la población de San Borja.
En esa población del sur beniano, organizaciones sociales y políticas preparan una gran recepción a los marchistas.
La tarde del martes, los indígenas pidieron la mediación de Villena para abrir un camino a la negociación con el Ejecutivo.
El Defensor exhortó a ambas partes a deponer las actitudes de enfrentamiento y a buscar una solución al conflicto de manera concertada y sin enfrentamientos de naturaleza alguna por el riesgo que ello implica.
54 kilómetros es la distancia aproximada que separa Totaizal de San Borja, la que se pretende cubrir en dos jornadas.
“Nuestra intención Es facilitar el acercamiento entre las partes para el diálogo”, afirmó el defensor del Pueblo, Rolando Villena ante el pedido de los indígenas de ser el mediador.
Romero minimiza los bloqueos en Santa Cruz
El ministro de la Presidencia, Carlos Romero, calificó de fracaso los bloqueos sostenidos por indígenas guaraníes y
ayoreos en Abapó y Pailón, que se llevan adelante en apoyo a los marchistas que se dirigen a la ciudad de La Paz en defensa del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS).
“La marcha ha intentado reforzarse con algunos bloqueos de caminos que han sido esporádicos, aislados, y han fracasado, y en este sentido, la dirigencia indígena debe ser muy reflexiva y tomar en cuenta que el diálogo debe desarrollarse” en procura de lograr una solución al conflicto.
La autoridad aseguró que sólo participaron 20 personas en la medida de presión.
Los colonizadores detendrán la marcha. El ejecutivo de las comunidades interculturales del norte de La Paz, Éver Flores, anunció que por resolución de sus bases, el sector se movilizará en procura de detener la marcha de los indígenas que se oponen a la construcción de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos.
Flores aseveró que en un ampliado se adoptó esta medida como una forma de presión para que los marchistas acepten dialogar.
Reiteró que sus bases evitarán que la marcha atraviese el norte paceño tropical.
Los problemas pueden presentarse cuando la columna llegue a proximidades de Yucumo y, si llegara a atravesar ese sector, hasta alcanzar la población de Caranavi, los problemas pueden ser mayores, pues los colonizadores ocupan esa provincia.
Las comunidades interculturales amenazan con emplear la violencia para impedir el paso de la marcha que se opone a la construcción de una carretera que atravesará el área protegida del TIPNIS.